13 feb 2020

Cosas de satélites que caen


Ahora ya vestido de astronauta bajó las escaleras de su edificio, se  detuvo en el paso de peatones, miró el semáforo: verde... Cruzó  la avenida y entró una vez más en aquel supermercado. Se movía de manera aparatosa, lenta e imprecisa por la falta de gravedad.
- Bonita mañana Lucía- Saludó por la espalda a su cajera favorita.
Ella , se giró al oír su nombre , reconoció aquella  voz...El labio inferior le temblaba , al igual que su mano izquierda, aún con los  cincuenta euros de la clienta.
 Alberto sujetó su mano: -  Deseo ser parte de tu universo-.

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